Cuando se realiza una dieta es normal que, después de un adelgazamiento inicial mas o menos evidente, la perdida de peso disminuya o incluso se detenga justo en el umbral del peso perfecto.
La explicación es que el organismo, después de unas semanas, se adapta a la menor cantidad de calorías que se le suministran diariamente.
La explicación es que el organismo, después de unas semanas, se adapta a la menor cantidad de calorías que se le suministran diariamente.
Esta es una fase muy delicada, porque es un momento en el que es fácil que se pierda la motivación y uno acabe por abandonar la dieta o el programa
En esta etapa de estancamiento, es necesario dar un nuevo impulso al metabolismo, reactivando el mecanismo de la perdida de kilos a través de una dieta especial, estudiada a propósito, así estimulamos nuevamente al metabolismo hasta llegar al peso ideal.
En los esquemas dietéticos se permiten tres cucharaditas de aceite de oliva al día para aliñar y cocinar. Use sal y condimentos con moderación. Beba al menos un litro y medio de agua a diario, de ser posible pura, nunca con azúcar.
No olvidemos que transgredir la dieta con golosinas, caramelos, grasas es contraproducente.
Tampoco pasemos por alto la cantidad de fruta prevista, a fin de ayudar al transito intestinal y a una rápida sensación de saciedad.
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